ella

Mi hermana es una persona cabronsísima. Sus palabras pueden ser como los dardos más afilados que saben dar en el punto exacto del dolor. Cuando las usa para defender a los suyos sabes que ganará la contienda pero cuando las usa en tu contra ya puedes ir por muchisimos curitas que el dolor que causan pegan hondo. La admiro demasiado, ese lado perro es el que me falta. Somos dos mundos diferentes.